¿Qué es ser un Hijo de María?
Ser un Hijo de María es formar parte de una obra espiritual dedicada a la oración, al servicio y a la caridad, asumiendo el compromiso de ser un pacificador en cada acto de la vida, bajo la protección y guía de María Santísima.
Desde 2007, la Virgen María aparece a los monjes videntes de la Orden Gracia Misericordia. Ella primero reveló Su faz como María, Madre de la Divina Concepción de la Trinidad y, tiempo después, se presentó como María, Rosa de la Paz. A través de los encuentros de oración, María Santísima realiza Apariciones públicas en varios países del mundo, en las que transmite Su mensaje de paz para toda la humanidad. Durante estos encuentros, la propia Virgen María invita a Sus hijos a que se consagren a Ella, como Hijos de María.
Un Hijo de María asume el compromiso espiritual de ayudar a Nuestra Señora a manifestar Sus Planes de Paz en el mundo por medio de la oración diaria, la contemplación de los misterios del rosario, el servicio y un cambio interior verdadero y de corazón que lo convierta en un ser despierto y consciente delante de las necesidades de sus semejantes y del planeta.
Los Hijos de María reciben la gracia de vestir un pedacito del Manto de la Virgen Santísima, representado por una camiseta celeste, y asumen siete principios en su consagración.
El compromiso de consagrarse representa enviar una respuesta al Universo de que queremos un mundo diferente: queremos que en los corazones de todos los seres humanos ¡reinen la paz, el amor y la fraternidad! La consagración es nuestros "sí".
Asociación María, asociación religiosa cristiana y ecuménica, fundada a pedido de Nuestra Señora, es la institución que ampara a todos los Hijos de María consagrados. Actualmente existen 3500 Hijos de María, en más de 30 naciones.
Los Hijos de María colaboran en la difusión de las instrucciones transmitidas por los Mensajeros Divinos, la Virgen María, Cristo Jesús y San José Castísimo, asumen la creación y sustentación de grupos de oración, participan y apoyan los encuentros ecuménicos de oración, tanto en la Peregrinación por la Paz como en los Centros Marianos.
Y los Hijos de María ¡también tienen su propia casa! Conozca la Casa de María, Nuestra Señora de los Pobres, localizada en la ciudad de Carmo da Cachoeira, Minas Gerais, Brasil.
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“Coloco Mi Manto sobre ustedes y les pido que lo lleven en el momento más difícil, y aun cuando el mundo tenga miedo de proclamar su fe, mantengan sobre sus cuerpos Mi Manto. Él los protegerá, los santificará y le traerá la Paz a todo el Universo”.
Virgen María, 25 de noviembre de 2015.
